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Niñas con Alas de Plata


Por Angel Castillo - asmdeportes.com

Wings U16 femenil se consagra como subcampeona nacional en el torneo de baloncesto 3x3 en León, Gto. Conoce su camino épico ante más de 60 equipos del país.

El sueño dorado estuvo cerca, pero el resultado ya es de por sí un triunfo histórico. El conjunto duranguense Wings, categoría U16 femenil, se consagró como subcampeón nacional del torneo de baloncesto 3x3, tras una destacada actuación en León, Guanajuato, donde compitió contra más de 60 equipos de todo el país.

Camino de gigantes

Tras jornadas maratonianas y partidos de alto voltaje, el quinteto integrado por Thalía Cordero, Regina Mena, Grecia Navar y Kamila Vargas logró abrirse paso entre los mejores equipos nacionales con juego colectivo, defensa intensa y una gran capacidad para jugar bajo presión.

Su camino a la final incluyó victorias clave ante rivales de alto nivel como Olimpus, Team de Mara, Valquirias y el representativo Cebador de Oaxaca, demostrando consistencia y temple en cada duelo.

🔥 Final ajustada ante Cats CDMX

La gran final fue ante Cats de Ciudad de México, un equipo muy físico y experimentado, que se llevó el título por la mínima. Aunque no llegó la corona, el desempeño de Wings fue aplaudido por entrenadores, árbitros y aficionados, quienes reconocieron el orden táctico y la disciplina mostrada durante toda la competencia.


🏆 Un logro más allá del podio

El mérito no solo es deportivo, sino también humano. Este equipo representa el esfuerzo, la constancia y el crecimiento del baloncesto femenil en Durango, guiado por el destacado entrenador César Cervantes, cuya labor técnica y motivacional fue fundamental para llegar tan lejos.

Este logro no habría sido posible sin el respaldo de importantes marcas duranguenses que apostaron por el proyecto:

  • Cables, Cadenas y Clavos
  • Productos Lácteos Covarrubias
  • FESA Inmobiliaria y Desarrollo
  • ALSA
  • John Boy Burguer
  • Provedusa
  • DentiKids
  • Dr. Roberto Valenzuela

Desde ASM Deporte, felicitamos a cada una de las jugadoras, al coach y a sus familias. Ser subcampeonas nacionales no es casualidad: es trabajo, sacrificio y amor por el baloncesto.

¡Orgullo Durango! Su historia apenas comienza.

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